El mercado energético en los hoteles – Selectra



El mercado energético en los hoteles

El mercado energético en los hoteles

Está claro que la pandemia de la COVID-19 ha reducido de manera drástica las reservas y el trabajo hotelero. Sin embargo, de cara a este 2021 se prevé una subida exponencial de las reservas, por lo que parece que el mercado volverá a recuperarse en este año.

Sin embargo, una de las mayores lastras del mercado hotelero es el gasto de energía. Los empresarios hoteleros a lo largo del mundo aún no han dado el salto hacia la optimización del elevado consumo de energía en este mercado.

Según diferentes estudios, casi el 70% de los hoteles podrían llevar a cabo medidas que supondrían un 20% de reducción del consumo.

 

La necesidad de ahorrar energía en los hoteles

Un hotel es un establecimiento que funciona las 24 horas del día y los 365 días del año. Además de contar con infinidad de habitaciones y clientes en modo privado, con el subsiguiente consumo. En este sentido, existen clientes más concienciados con el consumo y otros que no lo están.

Si eres gerente o responsable de algún establecimiento hotelero, lo más recomendable es optimizar el consumo de energía desde una doble perspectiva. Por un lado, por unas buenas prácticas vinculadas a la sostenibilidad y el respeto medioambiental. Por otro lado, por tu ahorro económico y la rentabilidad que esto representará para tu hotel.

Además, con el ahorro energético se consigue una reducción de la contaminación.

 

La responsabilidad medioambiental del sector hotelero

 Estamos en un momento crucial de cara a la contaminación y la sostenibilidad mundial. Por ello, se ha dado una gran importancia a la reducción del consumo energético, sobre todo porque la generación de energía sigue siendo muy agresiva con el medio ambiente.

Hay que tener en cuenta que el sector hotelero vive del entorno en que se ubica, por lo que se convierte en algo clave el cuidar el entorno del hotel.

 

Razones de peso para el ahorro energético en el mercado hotelero

Existen, a lo largo del mundo, hoteles de todo tipo y tamaño, y cada uno con un tipo de consumo energético. Sin embargo, existe un término medio entre todos ellos: entre el 14 y el 15% de los gastos de explotación de un hotel corresponden al consumo energético. En algunos casos, este porcentaje alcanza el 25%.

Esto coloca al consumo de energía como el segundo mayor gasto de un hotel, solo superado por las nóminas de los trabajadores. Además, ese consumo de energía se traduce en un 60% de las emisiones de CO2 que los hoteles generan.

Es por ello que los hoteles contemplan el consumo energético no como un gasto fijo, sino como una oportunidad de reducir sus costes sin grandes inversiones, aumentando la rentabilidad de la empresa.

Existen diferentes acciones para conseguir el máximo ahorro energético, entre las que destacan las siguientes:

  • Iluminación: Además del uso de iluminación solar, podemos cambiar las luminarias tradicionales por luminarias LED (consumen un 80% menos), instalar detectores de presencia, interruptores automáticos…
  • Climatización: Lo primero, y más importante, es tener un buen aislamiento térmico de paredes y suelos. Podemos instalar ventanas y puertas de doble cristal y, para la climatización, bombas de calor.
  • Implantar calderas de baja temperatura y calderas de condensación y usar sistemas de bajo consumo en duchas y grifos. Además, es importante tener sistemas de detección de averías y llevar a cabo un correcto mantenimiento de la red de tuberías.
  • Uso de energías renovables: donde destaca la energía solar. En este aspecto, comercializadoras como Endesa han comenzado a establecer alianzas con hoteles para la instalación de paneles solares.